Desnudo tenía algo de niño desvalido, de pirata sin rumbo en busca de una orilla sobre la que desplomarse. Tiene suerte de haberme encontrado, pensé. Suerte de que yo no vaya a echarle en cara sus fragilidades pasajeras. Suerte de que sea lo bastante egoísta como para permitirle que me quiera, a pesar de mis defectos. Suerte de que haya inventado para él un universo en el que mi satélite gira ansioso alrededor de su planeta. Y sin embargo soy yo quien debería darle las gracias.
Imagen: Jeune homme nu assis, Hippolyte Flandrin
Imagen: Jeune homme nu assis, Hippolyte Flandrin
6 comentarios:
Breve pero elocuentísima descripción ;)
Dejémoslo en tablas, ¿vale? Afortunados ambos, como en cualquier relación ideal (y sana).
Ya no se qué es más dificil: si ver al otro, por lo que es, o, simplemente, aceptar que no ha venido a este mundo para cumplir nuestras expectations...
Kisses reflexivos (y bowienianos) ***
"Suerte de que yo no vaya a echarle en cara sus fragilidades pasajeras. Suerte de que sea lo bastante egoísta como para permitirle que me quiera, a pesar de mis defectos."
Hermoso texto. Me gustó. Mucho.
Gracias por la visita.
Espero poder seguir leyéndote..
Besoo
:)
Lo que más me ha gustado del mundo blogger es saber que en verdad mucha gente lee. Yo creía que era menos, pero resulté estar equivocada. Me encanta tu blog por eso.
Muchos cariñitos :]
Esta chevere el blog. Sobre todo el recuerdo a Cortazar.
A la larga la suerte no existe, quizás en un encuentro casual sí, pero a la larga sólo queda lo que uno es, y lo que uno hace, y ahí no hay suerte sino voluntad. Que bueno sería querer sin necesitar como dice alhy.
Besos
No conozco esa versión que me dices, pero prometo buscarla. Dudo mucho que supere a la de Ella, pero será cosa de explorar jajaja.
Un abrazo =)
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